San Jerónimo Emiliani fue en vida un gran protector de los que sufrían, de los más desfavorecidos, de los pobres, los abandonados, los enfermos..., en general de los que por distintas causas estaban pasando por malos momentos. Su gran corazón le impulsó a dar amor, comprensión y auxilio a todos los que estaban necesitados, tanto en el aspecto material como en el físico o el espiritual. Acude a él con fe.
ORACIÓN DE PETICIÓN
Oh piadosísimo san Jerónimo, hombre puro y virtuoso,
desde tu nacimiento dotado de un corazón puro y grandioso
un corazón bueno y enormemente sensible a la miseria humana,
desde tu nacimiento dotado de un corazón puro y grandioso
un corazón bueno y enormemente sensible a la miseria humana,
tú que siempre recibiste la mirada misericordiosa del Señor,
y, con el dulcísimo apoyo maternal de María Santísima,
fuiste renovado en la vida de la gracia,
hoy te llamamos: danos tu generosa ayuda y protección
y alcánzanos de Dios, nuestro Padre todopoderoso,
una sincera conversión al Evangelio de la Salvación.