Oh gloriosa niña santa Filomena, ¡bendita seas!
candorosa virgen y valerosa mártir por amor a Dios,
ejemplo de virtud, de confianza, fe y esperanza,
generosa en la caridad, humilde y entregada en la vida,
a ti que eres milagrosa abogada de los que sufren
y dulce protectora de los necesitados, de los que padecen,
te suplico me recibas hoy bajo tu manto celestial
y me des la ayuda que tanto preciso en esta mala situación,
ampárame y protégeme con tu poderosa intercesión.