Gloria, alabanza y honor sea a Ti por siempre,
oh Rey y Redentor Jesucristo que vienes en nombre de Dios Padre
oh Rey y Redentor Jesucristo que vienes en nombre de Dios Padre
para hacer el bien, darnos ejemplo y redimir a los hombres.
En las Alturas te alaban todas las Celestiales Jerarquías,
y en la tierra el hombre mortal con todas las demás criaturas.
Oh mi poderoso Salvador, ven a mí, atiéndeme y escúchame,
oye mi sincera oración y no desprecies mi suplica,
En las Alturas te alaban todas las Celestiales Jerarquías,
y en la tierra el hombre mortal con todas las demás criaturas.
Oh mi poderoso Salvador, ven a mí, atiéndeme y escúchame,
oye mi sincera oración y no desprecies mi suplica,
dame esperanza, dame paciencia y humildad, reconfórtame,
enciende en mí interior el fuego de tu inmenso amor
enciende en mí interior el fuego de tu inmenso amor
y haz que me consuma la llama de tu eterna caridad.
Seguir leyendo la Oración del Jueves Santo
Te adoro y te venero Cristo Jesús,
Seguir leyendo la Oración del Jueves Santo
Te adoro y te venero Cristo Jesús,
porque con tu Sangre y tu Pasión has redimido al mundo.
Tú que subiste a Jerusalén para sufrir por nosotros
Tú que subiste a Jerusalén para sufrir por nosotros
y entrar así en la
gloria, condúcenos a la
Pascua eterna.
Tú que eres el alimento para nuestras almas
pues estás presente en la Sagrada Eucaristía,
llena nuestros corazones de sencillez y pureza;
Tú que, exaltado
en la Santa Cruz
quisiste ser
atravesado por la lanza del soldado,
sana nuestras
heridas, cura nuestros débiles corazones.
Tú, que
convertiste el madero de la Cruz en árbol de vida,
haz que los
renacidos en el bautismo
gocen de la
abundancia de los frutos de este árbol.
Tú, que clavado en la cruz perdonaste al ladrón arrepentido,
Tú, que clavado en la cruz perdonaste al ladrón arrepentido,
perdónanos también
a nosotros, pecadores.
Nuestra salvación,
Señor, es quererte y amarte.
Danos la abundancia de tus dones, danos tu gracia y perdón,
Danos la abundancia de tus dones, danos tu gracia y perdón,
y, así como por tu Pasión y muerte
esperamos alcanzar
lo que nuestra fe nos promete,
por tu gloriosa
Resurrección, o amabilísimo Jesús,
concédenos obtener
lo que nuestro corazón desea,
lo que precisamos para mejorar nuestra vida, para ser dichosos,
lo que precisamos para mejorar nuestra vida, para ser dichosos,
y concédenos en especial lo que confiadamente,
con tanta fe y viva esperanza te pedimos aquí:
(solicita con confianza lo que quieres conseguir).
Oh dulcísimo Jesús, esperanza mía, Rey supremo de los Cielos,
que por mi amor llevaste a hombros la pesada Cruz,
y me redimiste con tu Preciosa y vivificadora Sangre,
dame tus divinos auxilios, no alejes de mí tu misericordia,
atiende por favor las peticiones que te he hecho,
no me dejes en soledad ante las tribulaciones,
(solicita con confianza lo que quieres conseguir).
Oh dulcísimo Jesús, esperanza mía, Rey supremo de los Cielos,
que por mi amor llevaste a hombros la pesada Cruz,
y me redimiste con tu Preciosa y vivificadora Sangre,
dame tus divinos auxilios, no alejes de mí tu misericordia,
atiende por favor las peticiones que te he hecho,
no me dejes en soledad ante las tribulaciones,
ten clemencia de mí, acércate a mí, dame tu poderosa ayuda
y que tu bendición me acompañe noche y día.
Por nuestro Señor Jesucristo.
Amén.
y que tu bendición me acompañe noche y día.
Por nuestro Señor Jesucristo.
Amén.
OREMOS
Derrama, Señor, tu gracia y tu consuelo
Derrama, Señor, tu gracia y tu consuelo
sobre todas las personas que sufren´
sobre todos los que pasamos necesidad.
Ayúdanos a amamos como Tú nos amaste,
a darnos sin reserva a nuestros hermanos
y a ser testigos de tu Amor Santo.
sobre todos los que pasamos necesidad.
Ayúdanos a amamos como Tú nos amaste,
a darnos sin reserva a nuestros hermanos
y a ser testigos de tu Amor Santo.
Que el día del amor fraterno entre todos los pueblos
y todas las razas no tenga fin
que en este día del Jueves Santo
estemos unidos a Ti con amor fraternal
y nos anime a no dejar de cumplir tus Mandamientos.
Te lo pedimos por Nuestro Señor Jesucristo,
que contigo vive y reina por los siglos de los siglos.
Oh Señor Jesús, buen Pastor,
que preparas una mesa ante nosotros
y te nos das a ti mismo como alimento:
guíanos por los caminos de la Verdad y la Justicia,
para que arrancados de las tinieblas
y sin temer oscuridad, mal ni peligro alguno,
podamos gozar para siempre
del descanso de la casa del Padre.
podamos gozar para siempre
del descanso de la casa del Padre.
Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén. +
Reza con mucha devoción el Credo, Padrenuestro y Gloria.
Amén. +
Reza con mucha devoción el Credo, Padrenuestro y Gloria.
La oración se hace con gran esperanza e infinita fe
durante tres días seguidos.
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